La compañía afirma que el coche más pesado tendrá una autonomía de 600 kilómetros, lo que podría significar que cada módulo ofrecería 150 kilómetros si no fuera por la reducción de peso. Lo cierto es que dos módulos permitirán que los coches recorran más de 300 km, porque serán mucho más ligeros. Desafortunadamente, LIUX no ha revelado cuánto pesa su batería modular.
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Si la empresa fabricara un componente de alto voltaje diferente para cada uno de sus vehículos, esto significaría mayores costes de desarrollo. Y esa no es la única ventaja que aporta la idea: los compradores de LIUX podrían ser los que más beneficios aporten.
Cuando una batería tiene un problema, suele estar relacionado con algunas celdas, no con todas. Tanto es así que algunos talleres centrados en coches eléctricos intentan solucionar este problema sustituyendo los módulos defectuosos. Esto no está exento de controversia, y algunos otros talleres de reparación afirman que sólo parece solucionar el problema: eventualmente volverá a suceder.
Ahora imagine esto con un vehículo que tiene baterías modulares. Si uno de ellos está defectuoso, los demás pueden seguir funcionando hasta que se solucione el defecto, lo que evita que el coche se detenga en mitad de la autopista, como hacen algunos Tesla.
Además de permitir que el vehículo no se detenga (incluso con una autonomía reducida), las baterías modulares también reducen los costes de reparación. Si una batería cuesta alrededor de 100.000 R$, cuatro más pequeñas que hacen el mismo trabajo deberían costar 25.000 R$ cada una.
Esto va en contra de la tendencia actual de construcción de celda a paquete (CTP) y celda a cuerpo (CTB). En estos métodos, las baterías individuales se instalan directamente en la mochila o en la carrocería del automóvil. Esto aumenta la densidad energética porque las celdas no necesitan compartir espacio con cajas y otras estructuras y elementos de un módulo o paquete.
Por mucho que esto parezca tener sentido, sólo podremos confirmarlo cuando estemos seguros de que las baterías durarán más que el coche. Hoy en día, los vehículos eléctricos más antiguos se están convirtiendo en material de desguace simplemente porque sus baterías fallaron durante la garantía y no tiene sentido financiero darles una nueva. Con la tecnología de baterías que tenemos hoy en día, tiene más sentido tener baterías que se puedan reparar o reemplazar a costos más bajos. Esto es lo que hace brillante la idea de LIUX.
