La eterna pregunta que se hace cualquiera que esté pensando en comprar un coche es: ¿qué motor elegir? Aunque la opción eléctrica ha ganado popularidad en los últimos tiempos, todavía existen dos alternativas que siguen siendo las más valoradas. La pregunta entonces es: diésel o gasolina¿Cuál es el combustible más interesante para un coche en 2022? ¡Ven a comprobarlo todo con nosotros!
En las siguientes páginas explicaremos los aspectos a tener en cuenta a la hora de elegir la opción adecuada, pero no daremos la respuesta definitiva.
La clave para saber cuál es mejor, el diésel o la gasolina, es tener claro qué necesidades de movilidad queremos satisfacer y, sobre todo, qué uso queremos hacer del coche.
Diésel o gasolina, ¿cuál es mejor?
Como ya hemos dicho, no existe una respuesta única a esta pregunta. El diésel será mejor para algunos conductores y la gasolina para otros.
Una de las claves para elegir un combustible u otro es el número de kilómetros a recorrer.
Por regla general, la compra de modelos diésel se recomienda generalmente a los conductores que recorren más kilómetros, sobre todo porque el precio del diésel es históricamente más bajo que el de la gasolina. Pero ojo, porque esta diferencia es cada vez menor.
Ventajas y desventajas de los coches de gasolina.
Empecemos enumerando las ventajas (teóricas) de los coches de gasolina:
- Precio de compra más bajo
- Menor precio por litro (insistimos que esto está cambiando)
- Motores más silenciosos y menos contaminantes
- Suelen tener menos averías
Por lo general, la opción gasolina es la más recomendable cuando se trata de coches deportivos o, por el contrario, coches pequeños. En cuanto al kilometraje, son la alternativa de elección cuando no se prevé que el kilometraje sea muy elevado.
La principal desventaja de los coches de gasolina respecto a los diésel es su mayor consumo de combustible, por lo que son menos recomendables para trayectos largos.
Ventajas y desventajas de los coches diésel.
Al igual que los coches de gasolina, los coches con motor diésel tienen sus puntos buenos y malos.
Sin embargo, la principal desventaja de los coches diésel es su precio de compra ligeramente superior: el diésel era más barato que la gasolina. Pero esta brecha se está reduciendo y está destinada a desaparecer. Los coches diésel también son más contaminantes.
Por otro lado, un coche diésel consume menos combustible que uno de gasolina, por lo que suelen ser la opción recomendada para conductores que afrontan largos trayectos en su coche particular o que recorren muchos kilómetros cada día.
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