La Agencia Nacional de Petróleo, Gas Natural y Biocombustibles (ANP) regularizó la entrega de combustible en Brasil, el día 5. Con ello, las gasolineras podrán vender gasolina regular y etanol hidratado.
La medida llega en un momento delicado, con el aumento de los precios del combustible en todo el país. Con esto, la ANP buscó medidas para facilitar las ventas en todo el país, evitando problemas de consumo.
Actualmente, el valor del combustible en el país ha aumentado en más de 70% desde principios de año hasta ahora. Así, algunas regiones ya alcanzan el valor de casi R$ 8 reales por litro.
Para llegar a la decisión final, la agencia ha realizado consultas y audiencias públicas desde 2018. Es decir, no es una decisión de la noche a la mañana ni basada en hechos recientes.
Algunas reglas deben ser seguidas por las estaciones que quieran adoptar el nuevo método de venta, tales como:
- Estar al día con el programa de monitoreo de calidad de combustibles;
- La entrega sólo debería complementar el modelo de ventas común. En otras palabras, sólo puede ocurrir en posiciones que existen físicamente;
- El límite de entrega se restringe a los límites del municipio donde opera la estación física;
- El combustible sólo debe transportarse en camión que cuente con tanque y bomba. Además, un límite máximo de 2 mil litros;
- Vender únicamente a través de plataforma electrónica o aplicación digital;
Para las ventas digitales, las estaciones también solo pueden revelar el valor del combustible utilizando hasta 2 decimales. Por tanto, está prohibida la divulgación con 3 dígitos, como ocurre actualmente.
Además, otro estándar importante para el nuevo modelo es la posibilidad de que las estaciones vendan combustible de otras marcas, algo que actualmente no ocurre con los modelos tradicionales. Con esto, el suministro de combustible se convierte en una posibilidad real para los consumidores.
