Puede que no fuera el Lambo más bonito, ni tampoco el más potente. Pero el Lamborghini Jalpa (P350) marcó un momento histórico para los italianos. Presentado por primera vez en el Salón del Automóvil de Ginebra en marzo de 1981, fue el último deportivo V8 con motor central en la historia de la marca. Y no, el Lamborghini Urus no es un deportivo, es un SUV.
Entre 1981 y 1987 se fabricaron un total de 420 ejemplares del Lamborghini Jalpa. Siguiendo la tradición de Lamborghini, el Jalpa tomó su nombre de una raza de toro de lidia, el Jalpa Kandachia.
También era la última evolución del concepto de gran berlina touring del fabricante Sant'Agata Bolognese con un motor de 8 cilindros montado en una posición central trasera.
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El nacimiento del Lamborghini Jalpa
En primer lugar, el Lamborghini Jalpa presentado en Ginebra tiene una historia especial. Se basó en un Silhouette que, una vez producido, nunca se vendió. Fue devuelto a fábrica y utilizado como base para el nuevo modelo.
Presentaba un color bronce metálico especial y algunas características estéticas únicas que no se utilizaron en el modelo de producción.
Cuando el Jalpa entró en producción en 1982, lo hizo con una carrocería semi-acero, parachoques y tomas de aire del motor negros, así como luces traseras horizontales y llantas de aleación de 16 pulgadas.
Estos se fabricaron directamente a partir del prototipo del Athon. Llevan neumáticos Pirelli P7 de perfil bajo.
El motor Lamborghini Jalpa
En primer lugar, la innovación técnica más significativa del Jalpa fue la evolución final del motor V8 de 90°. Fabricado íntegramente en aluminio, presentaba cuatro árboles de levas en cabeza controlados por una cadena.
Era el mismo que originalmente se adaptó al Urraco y al Silhouette. Sin embargo, la carrera del pistón aumenta hasta los 75 mm, dando una cilindrada de 3,5 litros.
El diámetro del pistón también aumenta hasta los 86 mm. El combustible lo proporcionaban cuatro carburadores gemelos Weber 42 DCNF y una relación de compresión de 9,2:1. La caja de cambios era manual, de cinco marchas.
Como resultado, este motor proporcionaba una potencia máxima de 255 CV (190 kW) a 7.000 rpm y un par máximo de 314 Nm de par máximo a 3.500 rpm.
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Sin embargo, todo esto permitió al Lamborghini Jalpa alcanzar los 100 km/h desde parado en 6 segundos. Pasó de 0 a 160 km/h en 19,1 segundos y alcanzó una velocidad máxima de 248 km/h. Es importante destacar que la suspensión era independiente en las cuatro ruedas, con puntales McPherson delante y detrás.
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